chocolate y gelatina de frutas
Ingredientes para 9 mini cakesPonemos la gelatina en agua fría para que se ablande.
Pelamos los mangos y los troceamos , los colocamos en una cacerola al fuego, le añadimos 50 ml de agua y el azúcar, lo dejamos cocer 10 minutos removiendo ligeramente.
Lo trituramos todo con el túrmix y lo pasamos por un colador chino fino, nos quedamos con el jugo resultante, necesitamos unos 130 ml de zumo aproximadamente.
Calentamos el zumo de mango al fuego y le añadimos la gelatina bien escurrida, dejamos que hierva, removiendo hasta que se deshaga completamente la gelatina. Seguidamente rellenamos el fondo de la mitad de las cavidades de los moldes , 1 cm aproximadamente. El resto lo reservamos para la gelatina de granada.
Como se elabora la gelatina de granadaHidratamos la gelatina en agua fría para que se ablande.
Desgranamos las dos granadas, pasamos por la licuadora y nos quedamos con el zumo. Lo pasamos por un chino fino. Lo colocamos en una cacerola y le añadimos el azúcar. Dejamos que reduzca un poco, necesitamos 130 ml aproximadamente de zumo de granada. Le agregamos unas gotas de colorante rojo para que nos quede un rojo más intenso, ya que el zumo al cocer pierde bastante color.
Le añadimos la gelatina bien escurrida, dejamos que hierva removiendo para que se deshaga por completo. Seguidamente rellenamos el fondo del resto de moldes, igualmente 1 cm de grosor más o menos.
Introducimos en el frigorífico para que se cuajen las dos gelatinas.
En primer lugar, hidratamos la gelatina en agua muy fría para que se ablande.
Reservamos a paste un poco de nata, la suficiente para deshacer la gelatina en caliente. En un cuenco montamos el resto de la nata junto con el azúcar, no es necesario que esté demasiado firme. Reservamos en la nevera.
Fundimos el chocolate negro al baño María, retiramos y dejamos templar.
Calentamos la nata sin montar que hemos reservado anteriormente, le agregamos la gelatina bien escurrida removiendo hasta que se deshaga y se integre por completo.
Incorporamos esta nata con gelatina a la nata montada que tenemos en la nevera, mezclamos bien y a continuación se la añadimos al chocolate fundido removiendo suavemente hasta que se integre. Rellenamos los moldes hasta arriba, y reservamos en el frigorífico.
A la hora de servir, desmoldamos del revés, para que la gelatina nos quede en la parte de arriba. Y podemos decorar con fruta fresca, frutos secos picados o con chocolate.